El creciente rechazo de los habitantes de  Rapa Nui hacia del Estado chileno está haciendo que en la actualidad coexistan dos sistemas de gobierno local, teniendo, por un lado, a la Gobernación y la Alcaldía, como en el resto de las provincias y comunas del país, pero también el Parlamento Rapa Nui y el Consejo de Jefes de Clanes, estos últimos con una clara legitimación y liderazgo entre los habitantes originarios.

Son cerca de tres mil quinientos isleños los que en la actualidad de están movilizando para desvincularse de la soberanía chilena. Una acción clara en este sentido fue el boicot a la consulta indígena realizada el 25 de octubre pasado sobre la co-administración del parque nacional que se encuentra en la isla, en la que sólo votaron 319 personas.

En una entrevista publicada por La Segunda el presidente del Parlamento Rapa Nui, Leviante Araki, afirmó  que  Chile ha violentado sus derechos de forma sistemática y por que esta razón «A Chile hay que cerrarle las puertas. En el caso de mi familia, mi tribu y de todos los rapanuís nunca nos vamos a sentir chilenos, por la soberbia de su Estado», aseguró.

La actual Constitución señala en su Artículo 3 que Chile es un Estado unitario y que «La administración del Estado será funcional y territorialmente descentralizada, o desconcentrada en su caso, de conformidad a la ley». Sin embargo, en distintas zonas del país se están escuchando voces de etnias originarias que no se sienten representadas por la nacionalidad y soberanía chilena, que abogan por un reconocimiento constitucional como tales, o bien buscan la completa autonomía.

Por su parte, el Artículo 10 define a los chilenos como, «los nacidos en el territorio de Chile, con excepción de los hijos de extranjeros que se encuentren en Chile en servicio de su Gobierno, y de los hijos de extranjeros transeúntes, todos los que, sin embargo, podrán optar por la nacionalidad chilena», lo que incluye a los pueblos originarios.

Evidentemente el líder Rapa Nui no está de acuerdo con esta definición: «No somos chilenos. Chile está a 4.600 millas náuticas y Rapa Nui está acá, en medio del océano. Yo prefiero ser chino, japonés o boliviano antes de ser chileno».

«Vamos a ver cómo reacciona el gobierno frente a las demandas obre la devolución de las tierras. Si agiliza la restitución de los sitios sagrados y cementerios ancestrales (que incluyen a los moáis y sus plataformas o «ahu») y soluciona el problema de la migración a la isla, no habrá más protestas, pero si el gobierno no quiere responder vamos a cerrar la isla a Chile», Sentenció Araki.